Conversaciones valientes para jóvenes: Violencia a… | UMC YoungPeople
Connecting young people and their adult leaders to God, the church, and the world
Discipleship Ministries
About News Contact Us
Home Lead Serve Grants Scholarships Podcasts
About News Contact Us Discipleship Ministries
Young People's Ministries
Lead Serve Grants Scholarships Podcasts
7
July 2022

Conversaciones valientes para jóvenes: Violencia a causa de las armas de fuego

Por Cindy Klick

Este recurso tiene el propósito de capacitar al liderato joven con un modelo para crear espacios valientes, donde los jóvenes puedan compartir sus pensamientos y sentimientos sobre temas apremiantes. El punto no es llegar a un consenso, sino que simplemente el o la líder joven cree un espacio donde todos puedan ser escuchados.

Este recurso les pide a los participantes explorar la violencia armada y las leyes sobre armas al compartir sus opiniones, investigar y discutir cualquier impacto local en sus comunidades a partir de la violencia que incluye armas. Esta guía para crear espacio y discusiones respetuosas está relacionada con la serie publicada por Ministerios de Discipulado, titulada «Conversaciones valientes», cuyo autor es Scott Hughes, secretario general asociado, Programación Estratégica, Ministerios de Discipulado, Iglesia Metodista Unida. (Para acceder a la versión diseñada para adultos sobre este tema, favor de buscar el artículo titulado «Conversaciones valientes sobre la violencia con armas de fuego» publicado aquí).

Arreglo del espacio con un ambiente seguro:

  • Arregle el salón con un pequeño círculo de cinco a diez sillas; también considere un espacio cómodo en el piso o un lugar al aire libre tranquilo y templado, si el clima es apropiado.
  • Colocar en letra grande las guías para la conversación y el pacto creado por el grupo pequeño alrededor del salón, con el propósito de garantizar una conversación entusiasta y ayudar a la eficacia del facilitador de la conversación (Refiérase a «Ejemplos de guías para las conversaciones valientes».

Materiales:

  • Sillas u otro espacio cómodo en el área
  • Etiquetas para los nombres de los jóvenes
  • Bolígrafos o lápices y un cuaderno pequeño para cada participante con el propósito de animarlos a escribir sus reflexiones.
  • Una piedra lisa que tenga una palabra escrita con un marcador con tinta permanente (por ejemplo: paz, harmonía, calma, o así por el estilo) que sirva como un artefacto que indique «cuándo hablar».
  • Notas adhesivas grandes (estilo Post-it) donde estén escritos el pacto y las guías;
  • Marcadores
  • Tener impresa la oración por la paz de San Francisco de Asís.
  • Campanilla (se puede producir el sonido a través de un teléfono celular), una vela y encendedor
  • Cronómetro de dos minutos; se puede usar la aplicación de un teléfono celular para indicar el tiempo.

Tiempo (una sesión de 90 minutos)

  • Oración de apertura (5 minutos)
  • Introducción al tema (10 minutos)
  • Estar presente (10 minutos)
  • Análisis personal del tema (10 minutos)
  • Receso con refrigerio (10 minutos)
  • Rotación por las estaciones de conversaciones (30 minutos)
  • Reflexiones (10 minutos)
  • Oración de clausura (5 minutos)

Tiempo (Dos sesiones de 60 minutos)

  • Oración de apertura (5 minutos)
  • Introducción al tema (5 minutos)
  • Estar presente (5 minutos)
  • Análisis personal del tema (10 minutos)
  • No hay receso
  • Rotación de estaciones de conversaciones (20 minutos)
  • Reflexiones (10 minutos)
  • Oración de clausura (5 minutos)

Oración de apertura

(La misma para una o dos sesiones).

Comience la sesión al encender una vela o al tocar la campanilla para representar la presencia de Dios en la reunión. Empiece con un minuto de silencio. Distribuya las copias con la oración por la paz de San Francisco de Asís, y que la lea en voz alta un voluntario/una voluntaria o el facilitador/la facilitadora:

Señor, haz de mi un instrumento de tu paz. Que allá donde hay odio, yo ponga el amor.
Que allá donde hay ofensa, yo ponga el perdón. Que allá donde hay discordia, yo ponga la unión.
Que allá donde hay error, yo ponga la verdad. Que allá donde hay duda, yo ponga la fe.
Que allá donde hay desesperación, yo ponga la esperanza.

Que allá donde hay tinieblas, yo ponga la luz.
Que allá donde hay tristeza, yo ponga la alegría.

Oh Señor, que yo no busque tanto ser consolado, cuanto consolar, ser comprendido, cuanto comprender,
ser amado, cuanto amar. Porque es dándose como se recibe, es olvidándose de sí mismo como uno se encuentra a sí mismo, es perdonando, como se es perdonado, es muriendo como se resucita a la vida eterna.

Amén.

Introducción

(La misma para una o dos sesiones; si usa el formato de dos sesiones, la introducción de la segunda sesión será un resumen de lo cubierto en la primera sesión).

Preséntese como el facilitador/la facilitadora de la sesión. Provea un resumen del tema principal sobre la violencia con armas de fuego, y describa la necesidad de tener un espacio seguro donde los participantes puedan expresar libremente sus opiniones y perspectivas. Como preparación para establecer este espacio seguro, familiarícese con estos Ejemplos de guías para las conversaciones valientes. Asegúrese de incluir, como mínimo, lo siguiente:

  • Enlaces para los sitios en la web, los cuales aparecen en una lista al final de este recurso.
  • Artículos relacionados o elementos informativos asociados a cualquier evento de violencia con armas de fuego que haya sucedido en el área de su iglesia.
  • Los cuatro puntos mencionados en «Conversaciones valientes: Miedo a ofender al hablar».
  • No podemos controlar cómo alguien responde a nuestro punto de vista, solo en la forma que hablamos y reaccionamos.
  • Los descargos de responsabilidad pueden ser útiles. (Por ejemplo: «Puede que no lo diga de la forma correcta, pero lo que estoy tratando de decir es ______»).
  • Confíe en que las relaciones son lo suficientemente fuertes como para sobrevivir momentos en que no se expresa lo que se quiere decir y diferentes opiniones. Recuerde a los jóvenes que todos tienen un lugar en su ministerio e iglesia.
  • Respete a los demás participantes, y espere que estén tan entusiasmados como usted por expresar sus pensamientos, opiniones y creencias.

Si los miembros del grupo no se conocen entre sí, facilite breves presentaciones. Lea «Ejemplos de guías para las conversaciones valientes» (puede crear su propia lista al usar estas guías), y solicite información adicional a los participantes para un crear un pacto de comportamiento respetuoso durante las conversaciones. Asegúrese de que todos los participantes entiendan y puedan consultar el pacto durante las conversaciones, si es necesario.

Busque el consenso con los participantes al acordar crear y mantener un clima de respeto y escuchar atentamente. Esto puede ayudarlos a convertirse en mejores amigos, compañeros de clase, vecinos y miembros de la familia. Comparta con el grupo una cita atribuida a Juan Wesley y a otros teólogos: «No necesitamos pensar de la misma manera para amar de la misma manera».

Hacerse presente

(Debe ocurrir rápidamente en formato de dos sesiones).

Si el número de participantes supera a las seis personas, divídalos en dos grupos más pequeños. Permita a cada participante uno o dos minutos para hacer preguntas, mencionar temores o desconfianza sobre el tema en cuestión. Haga que quien hable sostenga la «piedra» que indica el momento para hablar, y se la pase a la siguiente persona cuando termine su tiempo. Pida a los participantes que dejen a un lado sus suposiciones; no permita interrupciones. Recuerde a los participantes que las discusiones sobre el tema se darán más tarde. El propósito es tener un diálogo (conversación entre dos o más personas) más que un debate (argumento formal). Si los jóvenes no están seguros sobre qué compartir, considere hacer las siguientes preguntas:

  • Cuando escuchas las palabras «violencia con armas de fuego», ¿qué te viene a la mente?
  • ¿Están las armas conectadas con la violencia?

Análisis personal del tema

(Permanece igual si se usa una o dos sesiones; si se usan en las dos sesiones, la segunda sesión será una revisión de lo que se discutió en la primera sesión).

Distribuya cuadernos pequeños y materiales para la escritura. Pida a los participantes que escriban sus nombres en los cuadernos. Estos cuadernos podrán usarlos después de la sesión para su continuo uso personal. Permita a los participantes de cinco a diez minutos para anotar ideas sobre el control de armas de fuego con bases en las noticias, experiencias personales, datos, información educativa y opiniones que respalden sus ideas. Algunos enlaces sugeridos se encuentran al final de este artículo. Esto les dará tiempo para pulir sus puntos de vista personales y reflexionar sobre sus posiciones con más calma. Pueden consultar las notas más adelante, según sea necesario. Los diálogos estructurados para el aprendizaje, así como los recordatorios para respirar antes de hablar, ayudan a los estudiantes a evitar el impulso de «pelear o huir» del diálogo. Si los participantes tienen a su disposición dispositivos electrónicos para buscar en el internet, pueden usarlos en esta parte de la sesión.

Receso

(Solo en el formato de una sesión).

Muévase a un espacio diferente o afuera, si es posible, para que los participantes tengan tiempo de respirar al aire libre, y despejarse de alguna conversación intensa. Ofrezca agua embotellada y refrigerios empacados individualmente que eviten posibles problemas de alergia, como nueces o gluten.

Rotación por los diferentes centros de conversación

(Menos tiempo disponible que el formato de dos sesiones).

Coloque las sillas o el área para sentarse en forma circular, con un espacio abierto ya sea en la parte superior e inferior del círculo. Coloque el objeto que indique el turno para hablar (la piedra) en el medio. Al estilo de las sillas musicales, incluya una o dos sillas menos que el número de participantes en ese círculo, con asientos adicionales fuera de ese círculo de discusión. Invite a los participantes a traer sus cuadernos al círculo, de esa manera podrán hacer sus anotaciones y luego recordar los puntos de discusión o cualquier información de interés. Pida a quienes se sientan listos para comenzar la discusión que se sienten en las sillas dentro del círculo. Designe dos minutos para hablar, y pídale a la primera persona que levante el objeto que indica el turno de hablar antes de empezar a hablar.

Los participantes pueden abandonar el círculo en cualquier momento y sentarse en las sillas fuera del círculo, si se sienten más seguros o ya han compartido completamente su punto de vista y quieren dejar su espacio a otro participante. Pida a cada participante que intente hablar dos veces, para que todos los miembros del grupo se sientan escuchados. Este enfoque circular invita a más discusión que el tiempo titulado «Hacerse presente». Los participantes pueden usar sus notas para plantear puntos y comenzar la conversación. Si la conversación se atasca o se detiene, las siguientes sugerencias y preguntas pueden ser útiles para el facilitador o la facilitadora:

  • «¿Puede compartir una experiencia de vida que haya influido en sus puntos de vista sobre las armas y la violencia armada?».
  • «Algunas barreras que pueden necesitar ser superadas para que los demás entiendan mi posición son…».
  • «Algo sobre las armas y la violencia armada que me gustaría poder entender mejor de quienes tienen opiniones diferentes a la mía es...».

Reflexiones

(El formato de dos sesiones requerirá que las reflexiones sean breves).

Regresar al área de asientos que se ha configurado para que todos los participantes estén incluidos y puedan verse fácilmente. Pídales que traigan sus cuadernos con sus anotaciones para ayudarlos a enfocarse en la conversación. Dé a las personas un minuto para reflexionar sobre lo que han escuchado decir a otros, no para reafirmar sus propias opiniones. Deben usar el objeto que indica el turno de hablar para evitar interrupciones. Indique a los participantes que practiquen escuchar reflexivamente, y busquen comprender otras ideas en lugar de preparar sus argumentos para cuando sea su turno de hablar. Permita que todos los que se sientan cómodos compartan: «Una cosa que sacaré provecho de esta conversación es . . .».

Oración de clausura

(Sucede lo mismo si se usa el formato de una o dos sesiones).

Toque la campanilla y observe nuevamente un minuto de silencio. El facilitador o un voluntario cierra el tiempo juntos leyendo la oración de apertura. (Otros recursos de oraciones están disponibles aquí).

Definiciones

Arma de fuego automática –Arma de fuego que recarga automáticamente después de cada disparo, y con la que es posible efectuar varios disparos sucesivos mientras permanezca accionado el disparador. Es decir, mientras el gatillo esté presionado, el arma no deja de realizar ninguna función y sigue disparando continuamente. (Para obtener más información sobre las diferentes clases de arma de fuego, haga clic aquí).

Nacionalismo cristiano – «El nacionalismo cristiano identifica a la nación con la voluntad y acción de Dios en el mundo; combina la identidad nacional con la identidad cristiana; e identifica el servicio a la nación con el servicio a Dios», escribe el Dr. David W. Scott, investigador histórico metodista, director de Teología Misional en la Junta General de Ministerios Globales de la Iglesia Metodista Unida. (Del artículo: «¿Qué es el nacionalismo cristiano?», por el Revdo. Ryan Dunn, publicado por ReThink Church, Comunicaciones Metodistas Unidas).

Control de armas de fuego – El conjunto de leyes o políticas que regula la fabricación, venta, transferencia, posesión, modificación o uso de armas de fuego por parte de civiles.

Tiroteo masivo – según la Enciclopedia Libre Wikipedia, es un incidente de violencia en la cual se emplea armas de fuego, donde se encuentran implicados un elevado número de víctimas. No obstante, existe una falta de consenso sobre cómo definir los tiroteos masivos. La mayoría de las definiciones describen un mínimo de tres o cuatro muertes debido a la violencia armada, sin incluir al tirador o autor del tiroteo.

Tiroteo escolar – Es un ataque en el cual un individuo o un grupo de sujetos realizan un ataque con armas de fuego a una institución educativa, como por ejemplo a una escuela primaria, un un instituto de secundaria, una universidad o algún otro centro educativo.

Segunda Enmienda –La Segunda Enmienda a la Constitución de los Estados Unidos protege el derecho a poseer y portar armas del pueblo estadounidense, propuesta el 25 de septiembre de 1789, y aprobada el 15 de diciembre de 1791, junto con otros nueve artículos de la Declaración de Derechos. La Segunda Enmienda establece que ni el gobierno federal de los Estados Unidos ni los gobiernos estatales y locales pueden infringir el derecho a portar armas.

Arma semiautomática – Arma de fuego que después de cada disparo se recarga automáticamente, y con la que solo es posible efectuar un disparo al accionar el disparador cada vez.

Recursos sugeridos

Pasajes de las Escrituras

  • Mateo 5:9, 38-41 – Pacificadores, voltear la otra mejilla.
  • Romanos 12:19 – No tomar venganza.
  • Eclesiastés 9:18 –La sabiduría sobre las armas de guerra
  • Éxodo 20:13 – No matarás.
  • Levítico 19:16 – No poner en peligro la vida de tu prójimo.
  • Mateo 26:52 – Quienes a hierro matan, a hierro mueren.

Sitios en la web

Español

Inglés

Courageous Conversations Sample Outlines Hispanic Member Issues school violence Safety